jueves, 19 de enero de 2012

Buenos días, preciosa.

Tu en un cuarto que no conoces de nada, quieta, acostada, con un camisón fácil de quitar, un desconocido que conoces desde que tienes razón de ser se haya en la entrada de la puerta, quieto, de pie, sin camisa, en vaqueros, solo el veros os estremece de modo inexplicable, de igual manera os atraéis como los polos apuestos de un imán cercano, el primer contacto al borde de la cama es mínimo pero el placer de saber que es real y compartida las ansias que os devoran son máximas... Continuáis con suaves movimientos de cadera y manos, caricias que solo saben expresar quien las han sentido y sabido apreciar, ahora os fundís en besos infinitos que acaban pero dejan una estela reluciente de ganas de mas, mas, mas, vuestros movimientos ya se han fusionado en uno y efusivamente te quita el camisón con ansia como si en ello le fuese la vida, tu rápida y precisa calculas la distancia entre su cuerpo y el tuyo para acercarte lo mas mínimo y conseguir un roce exento de caricia, continuas quitándole los vaqueros, piensas que le sobran y estas en lo cierto, no deseas ver su ropa interior, tu yaces desnuda sobre tu lecho y tu desconocido mil veces conocido espera a que te acerques en señal de duelo y conflicto, su ropa interior ya se perdió en la oscuridad del cuarto anónimo, el se acerca a ti, abalanzándose sobre tu cuerpo, notas como su pecho roza con el tuyo, los labios iguales, se han vuelto uno, uno solo, el roce de tus manos con su pene hacen que todo se torne en gemidos y deseo, impaciente dejas lo que estabas haciendo para que el se acerque a ti, le agarras de la nalga izquierda y tiras con fuerza, no se resiste, no puede, sobre ti, volando sin miedo, usa sus manos para no aprisionarte entre la espada y la cama, te acomete en un silencio asfixiante que pide mas, mas, mas, voláis y seguís volando por espacio de una eternidad interminable pero todo esto se resuelve en un “buenos días, preciosa”.

5 comentarios:

elruidovulgar dijo...

Abelo vuelve fuerte y con ganas

Abel Sanz dijo...

Jajaja algo de eso sera

Dulce dijo...

En la profundidad de esos ojos es posible encontrar la huella de un astro salvaje

Abel Sanz dijo...

-Usted no nada nada.
-Es que yo no traje traje.

Mª Dolores dijo...

buenos dias preciosa,ha sido una noche perfecta.